miércoles, 30 de junio de 2010

La FIFA saca tarjeta roja a Dios y le echa del Mundial de Sudáfrica


Si en algo destaca el fútbol es la pasión que levanta entorno en las aficiones. Y los momentos de mayor euforia se presentan cuando los equipos logran meter gol, algo que suele estar ligado a las celebraciones particulares de los jugadores: abrazos, gestos de acunar, correr hasta la banda, dar piruetas,… En el Mundial de Sudráfrica 2010 este tipo de gestos estarán permitidos, pero está prohibido santiguarse, elevar las manos al cielo u otro tipo de manifestación que pueda tener carácter religioso. Así lo ha indicado la FIFA; ni católicos, ni musulmanes, ni judíos, ni hindúes… nadie podrá demostrar su fe aún con pequeños detalles, ya no se puede ofrecer el sacrificio o el éxito. La FIFA ha expulsado a Dios del Mundial.

Así, el jefe de la FIFA, Joseph Blatter, acaba de decretar “que cualquier manifestación religiosa debe quedar fuera del fútbol” con el fin de “no incitar a la violencia”. Se levanta una gran pregunta entorno a esta decisión: ¿ha habido alguna vez un enfrentamiento en un estadio por un símbolo religioso? ¿Cuáles son las verdaderas motivaciones para convertir los estadios en el nuevo escenario de exclusión religiosa?

El motivo de la decisión tiene historia, pero el resultado no es el deseado por ninguna religión, afición y jugadores creyentes, sea cual sea su fe. La prohibición tiene su base en la celebración del equipo brasileño en la última Copa Confederaciones, que tras acabar el partido contra Estados Unidos, jugadores y miembros del cuerpo técnico formaron un círculo al centro de la cancha y abrazados recitaron una oración de acción de gracias, gesto que provocó un disgusto enorme a Jim Stjerne Hansen, presidente de la Federación Danesa de Fútbol.

El funcionario consideró “inaceptable” el asunto y escribió una carta: “la expresión de fervor religioso de los brasileños duró demasiado tiempo… y provoca una confusión entre religión y deporte”.

Una medida desproporcionada, ya que este tipo de gestos no hacen daño a nadie, y el agradecimiento a Dios siempre es algo positivo y crea espíritu de equipo.

Más información en Catholic.net

http://www.apostolhoy.org/2010/06/el-mundial-de-futbol-sudafrica-2010-deja-a-dios-fuera.html