domingo, 8 de diciembre de 2013

2do Domingo de Adviento

2do. Domingo de Adviento



2do. domingo de Adviento
Encendemos, Señor, esta luz,
como aquel que enciende su lámpara
para salir en la noche,
al encuentro del amigo que ya viene.
En esta segunda semana del Adviento queremos
 buscarte, encontrarte  
y esperarte  meditando tu palabra.
  Muchas sombras nos envuelven.
Muchos halagos nos adormecen.
Queremos estar despiertos y vigilantes,
porque tú nos traes la luz más clara,
la paz más profunda,
y la alegría más verdadera.

 ¡Ven, Señor Jesús! ¡Ven, Señor Jesús!
 El Adviento es tiempo de acercamiento sincero al Señor, quien está por venir y que a la vez ya está entre nosotros. Pero no podemos acercarnos a Él sino lo buscamos, sino estamos en constante tensión por ponernos en su presencia.
La oración, personal y comunitaria, constituye un medio eficaz de búsqueda hacia un encuentro real con el Señor Jesús; mediante la escucha atenta, la meditación y la interiorización de su Palabra, lo que debe constituirse en una exigencia y necesidad en este tiempo de espera.                                
Todos tenemos experiencia, en la existencia cotidiana, de tener poco tiempo para el Señor y poco tiempo también para nosotros, explico su Santidad Benedicto XVI.    El Adviento “es una invitación a comprender que cada acontecimiento de la jornada es un gesto  que Dios nos dirige,  signo de la atención que tiene por cada uno  de  nosotros”.                                                           
Palabras del Santo Padre Benedicto XVI, en visperas del 1er domingo de Adviento 2009
Hoy, segundo domingo  de Adviento, tiempo de búsqueda  y oración encenderemos  el segundo cirio virtual, que representará  esta semana:   la luz de nuestra plegaria sencilla y sincera.”  
Incúlcame más y más  el espíritu de oración, alza continuamente mi corazón hacia las estrellas  del cielo, haz que en todo momento  mire el sol de Cristo y que en El confíe en cada circunstancia de la vida.  P. Kentenich
  Ofrezcámosle  nuestra oración al Señor.   Miremos el mundo, nuestra patria,  nuestro barrio, nuestra familia con amor y comprensión.  Llevémosle al Señor esta mirada  y roguémosle con nuestra oración que Él mire  con su bondad a la humanidad.
Pidámosle a María, Madre del Adviento, Virgen de la esperanza  que  nos enseñe a esperar con su misma  actitud orante. (Te invitamos a rezar un Salve)
Recopilacion de textos varios 

domingo, 1 de diciembre de 2013

1er Domingo de Adviento

       
 
Encendemos, Señor, esta luz,
             como aquel que enciende su lámpara
            para salir en la noche,
             al encuentro del amigo que ya viene.
            En esta primera semana del Adviento
       queremos levantarnos para esperarte preparados,
            para recibirte con alegría.
 
         Muchas sombras nos envuelven.
        Muchos halagos nos adormecen.
         Queremos estar despiertos y vigilantes,
        porque tú nos traes la luz más clara,
        la paz más profunda,
      y la alegría más verdadera.
 
  ¡Ven, Señor Jesús! ¡Ven, Señor Jesús! 
  …En Adviento,  Dios «viene»: viene para estar con nosotros, en cada una de nuestras situaciones; viene para vivir entre nosotros, a vivir con nosotros y en nosotros; viene a llenar las distancias que nos dividen y separan; viene a reconciliarnos con Él y entre nosotros. Viene en la historia de la humanidad para tocar a la puerta de cada hombre y de cada mujer de buena voluntad, para ofrecer a los individuos, a las familias y a los pueblos el don de la fraternidad, de la concordia y de la paz. En  Cristo están invitados a permanecer en espera vigilante y activa, alimentada por la oración y por el compromiso concreto del amor. 
…El Adviento es por excelencia el tiempo de la esperanza, en el que los creyentes en  Cristo están invitados a permanecer en espera vigilante y activa, alimentada por la oración y por el compromiso concreto del amor. 
   ¡Que el acercarse de la Navidad de Cristo llene los corazones de todos los cristianos  de alegría, de serenidad y de paz!   Palabras del Santo Padre Benedicto XVI,   del domingo 3 de diciembre de 2006 antes del Angelus 
 Hoy, primer domingo  de Adviento, tiempo de espera y conversión encenderemos  el primer cirio virtual,  que representará  esta semana   la luz de nuestra alegría. 
 La alegría debe irradiarse en nuestro propio  rostro.  P. Kentenich 
Pidamosle a María,   Madre del Adviento, Virgen de la esperanza 
 
 que   nos enseñe   a esperar con renovada alegría y su misma fe.
 (Te invitamos a rezar  un Salve)

ADVIENTO EN UN DECÁLOGO

 
 
ADVIENTO EN UN DECÁLOGO
 
1.- Adviento es una palabra de etimología latina, que significa “venida”.
2.- Adviento es el tiempo litúrgico compuesto por las cuatro semanas que preceden a la Navidad como tiempo para la preparación al Nacimiento del Señor.
3.- El adviento tiene como color litúrgico al morado que significa penitencia y conversión, en este caso, transidas de esperanza ante la inminente venida del Señor.
4.- El adviento es un periodo de tiempo privilegiado para los cristianos ya se nos invita a recordar el pasado, vivir el presente y preparar el futuro.
5.- El adviento es memoria del misterio de gracia del nacimiento de Jesucristo. Es memoria de la encarnación. Es memoria de las maravillas que Dios hace en favor de los hombres. Es memoria de la primera venida del Señor. El adviento es historia viva.
6.- El adviento es llamada vivir el presente de nuestra vida cristiana comprometida y a experimentar y testimoniar la presencia de Jesucristo entre nosotros, con nosotros, por nosotros. El adviento nos interpela a vivir siempre vigilantes, caminando por los caminos del Señor en el justicia y en el amor. El adviento es presencia encarnada del cristiano, que cada vez que hace el bien, reactualiza la encarnación y la natividad de Jesucristo.
7.- El adviento prepara y anticipa el futuro. Es una invitación a preparar la segunda y definitiva venida de Jesucristo, ya en la “majestad de su gloria”. Vendrá como Señor y como Juez. El adviento nos hace proclamar la fe en su venida gloriosa y nos ayuda a prepararnos a ella. El adviento es vida futura, es Reino, es escatología.
8.- El adviento es tiempo para la revisión de la propia vida a la luz de vida de Jesucristo, a la luz de las promesas bíblicas y mesiánicas. El adviento es tiempo para el examen de conciencia continuado, arrepentido y agradecido.
9.- El adviento es proyección de vida nueva, de conversión permanente, del cielo nuevo y de la tierra nueva, que sólo se logran con el esfuerzo nuestro -mío y de cada uno de las personas- de cada día y de cada afán.
10.- El adviento es el tiempo de María de Nazaret que esperó, que confío en la palabra de Dios, que se dejó acampar por El y en quien floreció y alumbró el Salvador de mundo.

lunes, 4 de noviembre de 2013

OSMTH - Ccs : Fiesta de hoy-Fieles difuntos-2 de noviembre

Un poco de historia

La tradición de rezar por los muertos se remonta a los primeros tiempos del cristianismo, en donde ya se honraba su recuerdo y se ofrecían oraciones y sacrificios por ellos.

Cuando una persona muere ya no es capaz de hacer nada para ganar el cielo; sin embargo, los vivos sí podemos ofrecer nuestras obras para que el difunto alcance la salvación.

Con las buenas obras y la oración se puede ayudar a los seres queridos a conseguir el perdón y la purificación de sus pecados para poder participar de la gloria de Dios. 

A estas oraciones se les llama sufragios. El mejor sufragio es ofrecer la Santa Misa por los difuntos.

Debido a las numerosas actividades de la vida diaria, las personas muchas veces no tienen tiempo ni de atender a los que viven con ellos, y es muy fácil que se olviden de lo provechoso que puede ser la oración por los fieles difuntos. Debido a esto, la Iglesia ha querido instituir un día, el 2 de noviembre, que se dedique especialmente a la oración por aquellas almas que han dejado la tierra y aún no llegan al cielo.

La Iglesia recomienda la oración en favor de los difuntos y también las limosnas, las indulgencias y las obras de penitencia para ayudarlos a hacer más corto el periodo de purificación y puedan llegar a ver a Dios. "No dudemos, pues, en socorrer a los que han partido y en ofrecer nuestras plegarias por ellos".

Nuestra oración por los muertos puede no solamente ayudarles, sino también hacer eficaz su intercesión a nuestro favor. Los que ya están en el cielo interceden por los que están en la tierra para que tengan la gracia de ser fieles a Dios y alcanzar la vida eterna. 

Para aumentar las ventajas de esta fiesta litúrgica, la Iglesia ha establecido que si nos confesamos, comulgamos y rezamos el Credo por las intenciones del Papa entre el 1 y el 8 de noviembre, "podemos ayudarles obteniendo para ellos indulgencias, de manera que se vean libres de las penas temporales debidas por sus pecados". (CEC 1479)

Costumbres y tradiciones.

El altar de muertos

Es una costumbre mexicana relacionada con el ciclo agrícola tradicional. Los indígenas hacían una gran fiesta en la primera luna llena del mes de noviembre, para celebrar la terminación de la cosecha del maíz. Ellos creían que ese día los difuntos tenían autorización para regresar a la tierra, a celebrar y compartir con sus parientes vivos, los frutos de la madre tierra.

Para los aztecas la muerte no era el final de la vida, sino simplemente una transformación. Creían que las personas muertas se convertirían en colibríes, para volar acompañando al Sol, cuando los dioses decidieran que habían alcanzado cierto grado de perfección. 

Mientras esto sucedía, los dioses se llevaban a los muertos a un lugar al que llamaban Mictlán, que significa "lugar de la muerte" o "residencia de los muertos" para purificarse y seguir su camino.

Los aztecas no enterraban a los muertos sino que los incineraban.
La viuda, la hermana o la madre, preparaba tortillas, frijoles y bebidas. Un sacerdote debía comprobar que no faltara nada y al fin prendían fuego y mientras las llamas ardían, los familiares sentados aguardaban el fin, llorando y entonando tristes canciones. Las cenizas eran puestas en una urna junto con un jade que simbolizaba su corazón.

Cada año, en la primera noche de luna llena en noviembre, los familiares visitaban la urna donde estaban las cenizas del difunto y ponían alrededor el tipo de comida que le gustaba en vida para atraerlo, pues ese día tenían permiso los difuntos para visitar a sus parientes que habían quedado en la tierra. 

El difunto ese día se convertía en el "huésped ilustre" a quien había de festejarse y agasajarse de la forma más atenta. Ponían también flores de Cempazúchitl, que son de color anaranjado brillante, y las deshojaban formando con los pétalos un camino hasta el templo para guiar al difunto en su camino de regreso a Mictlán.

Los misioneros españoles al llegar a México aprovecharon esta costumbre, para comenzar la tarea de la evangelización a través de la oración por los difuntos.

La costumbre azteca la dejaron prácticamente intacta, pero le dieron un sentido cristiano: El día 2 de noviembre, se dedica a la oración por las almas de los difuntos. Se visita el cementerio y junto a la tumba se pone un altar en memoria del difunto, sobre el cual se ponen objetos que le pertenecían, con el objetivo de recordar al difunto con todas sus virtudes y defectos y hacer mejor la oración.

El altar se adorna con papel de colores picado con motivos alusivos a la muerte, con el sentido religioso de ver la muerte sin tristeza, pues es sólo el paso a una nueva vida. 

Cada uno de los familiares lleva una ofrenda al difunto que se pone también sobre el altar. Estas ofrendas consisten en alimentos o cosas que le gustaban al difunto: dulce de calabaza, dulces de leche, pan, flores. Estas ofrendas simbolizan las oraciones y sacrificios que los parientes ofrecerán por la salvación del difunto.

Los aztecas fabricaban calaveras de barro o piedra y las ponían cerca del altar de muertos para tranquilizar al dios de la muerte. Los misioneros, en vez de prohibirles esta costumbre pagana, les enseñaron a fabricar calaveras de azúcar como símbolo de la dulzura de la muerte para el que ha sido fiel a Dios.

El camino de flores de cempazúchitl, ahora se dirige hacia una imágen de la Virgen María o de Jesucristo, con la finalidad de señalar al difunto el único camino para llegar al cielo.

El agua que se pone sobre el altar simboliza las oraciones que pueden calmar la sed de las ánimas del purgatorio y representa la fuente de la vida; la sal simboliza la resurrección de los cuerpos por ser un elemento que se utiliza para la conservación; el incienso tiene la función de alejar al demonio; las veladoras representan la fe, la esperanza y el amor eterno; el fuego simboliza la purificación.

Los primeros misioneros pedían a los indígenas que escribieran oraciones por los muertos en los que señalaran con claridad el tipo de gracias que ellos pedían para el muerto de acuerdo a los defectos o virtudes que hubiera demostrado a lo largo de su vida. 

Estas oraciones se recitaban frente al altar y después se ponían encima de él. Con el tiempo esta costumbre fue cambiando y ahora se escriben versos llamados "calaveras" en los que, con ironía, picardía y gracia, hablan de la muerte.

La Ofrenda de Muertos contiene símbolos que representan los tres "estadios" de la Iglesia:

1) La Iglesia Purgante,
 conformada por todas las almas que se encuentran en el purgatorio, es decir aquéllas personas que no murieron en pecado mortal, pero que están purgando penas por las faltas cometidas hasta que puedan llegar al cielo. Se representa con las fotos de los difuntos, a los que se acostumbra colocar las diferentes bebidas y comidas que disfrutaban en vida.

2) La Iglesia Triunfante, que son todas las almas que ya gozan de la presencia de Dios en el Cielo, representada por estampas y figuras de santos. 

3) La Iglesia Militante, que somos todos los que aún estamos en la tierra, y somos los que ponemos la ofrenda.
En algunos lugares de México, la celebración de los fieles difuntos consta de tres días: el primer día para los niños y las niñas; el segundo para los adultos; y el tercero lo dedican a quitar el altar y comer todo lo que hay en éste. A los adultos y a los niños se les pone diferente tipo de comida.

Cuida tu fe

Halloween o la noche de brujas: Halloween significa "Víspera santa" y se celebra el 31 de Octubre. Esta costumbre proviene de los celtas que vivieron en Francia, España y las Islas Británicas. 

Ellos prendían hogueras la primera luna llena de Noviembre para ahuyentar a los espíritus e incluso algunos se disfrazaban de fantasmas o duendes para espantarlos haciéndoles creer que ellos también eran espíritus. 

Podría distraernos de la oración del día de todos los santos y de los difuntos. Se ha convertido en una fiesta muy atractiva con disfraces, dulces, trucos, diversiones que nos llaman mucho la atención. 

Puede llegar a pasar que se nos olvide lo realmente importante, es decir, el sentido espiritual de estos días. 

Si quieres participar en el Halloween y pedir dulces, disfrazarte y divertirte, Cuídate de no caer en las prácticas anticristianas que esta tradición promueve y no se te olvide antes rezar por los muertos y a los santos.

Debemos vivir el verdadero sentido de la fiesta y no sólo quedarnos en la parte exterior. Aprovechar el festejo para crecer en nuestra vida espiritual. 

Algo que no debes olvidar

La Iglesia ha querido instituir un día que se dedique especialmente a orar por aquellas almas que han dejado la tierra y aún no llegan al cielo.

Los vivos podemos ofrecer obras de penitencia, oraciones, limosnas e indulgencias para que los difuntos alcancen la salvación.

La Iglesia ha establecido que si nos confesamos, comulgamos y rezamos el Credo entre el 1 y el 8 de noviembre, podemos abreviar el estado de purificación en el purgatorio.
Autor: Tere Fernández | Fuente: Catholic.net

jueves, 31 de octubre de 2013

Cultura de muerte - Halloween es contrario a la fe católica, asegura Arquidiócesis Mexicana



MÉXICO, 29 Oct. 07 / 04:15 pm (ACI).- La Arquidiócesis de México señaló que “si buscamos ser fieles a nuestra fe y a los valores del Evangelio, tendríamos que concluir que la actual fiesta del Hallowen no sólo no tiene nada que ver con la celebración que le dio origen, sino que incluso es nociva y contraria a la fe y la vida cristiana”.
En un artículo de semanario Desde la Fe correspondiente a esta semana, la Arquidiócesis considera que el Halloween “rinde honor a una cultura de la muerte, que es producto de la mezcla de costumbres paganas” y lo más grave “es que la festividad se ha ido identificando con grupos neopaganos y celebraciones satánicas y ocultistas”.
En el texto titulado:“Preguntas frecuentes sobre Halloween” el Arzobispado señala que esa celebración “dista mucho de lo que debemos celebrar los cristianos: a los hombres que amaron heroicamente a Dios”, por eso exhortó a los fieles a no celebrar el Halloween.
Además se indica que en algunos países como a México, Irlanda y Estados Unidos, durante esta fiesta “se realizan misas negras, cultos espiritistas y otras reuniones relacionadas con el mal y el ocultismo”.
El artículo también cuestiona la costumbre principalmente entre niños, de disfrazarse de brujas, vampiros, fantasmas y monstruos lo que a entender son “expresiones malévolas promovidas por corrientes satánicas” e invitó a los padres a que el 1 de noviembre disfracen a sus hijos de personajes bíblicos o alguna persona que “sepan que ha sido buena y que, por lo tanto, seguramente estará en el cielo”.
El Arzobispado manifestó que continuará con su campaña, iniciada hace algunos años, para que se enseñe a los niños sobre “las cosas negativas del Halloween” y aconseja a los fieles seguir con sus acciones para contrarrestar esta fiesta pagana como el concurso sobre la vida de los santos y la catequesis que se imparte a los niños en los días previos a la fiesta de Todos los Santos.

Tomado de : http://www.aciprensa.com/noticias/halloween-es-contrario-a-la-fe-catolica-asegura-arquidiocesis-mexicana/

domingo, 20 de octubre de 2013

Campaña: Oremos Juntos por un mundo mejor.

TEMPLARIO de Venezuela, te invitamos a unirte el Domingo EN FAMILIA o en Grupo, a las 5:00pm a rezar el Rosario y formar parte de esta cadena de oración por un mundo mejor.

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Unir en el rezo del Santo Rosario a muchos niños y jóvenes; los 18 de octubre de cada año, a las 9 de la mañana, desde las familias, las parroquias y los colegios, para orar por la unión y la paz. Esto lo hemos venido realizando desde el año 2.005 con gran éxito; por medio de la campaña del "Consejo Nacional de Laicos de Venezuela" llamada "Un Millón de Niños Rezando el Rosario por la Unión y la Paz".
  • ¿Por qué una jornada de oración?

    - Porque la unión y la paz en el mundo entero son dos valores muy importantes para vivir en armonía.


    - Porque el fruto de la oración es la fe, el fruto de la fe es el amor, el fruto del amor es el servicio y el fruto del servicio es la paz.    

    - Una jornada de oración nos ayuda a unirnos en una manifestación de fe y devoción a nuestra Madre María Santísima.

    - Motiva a gente de todas partes del mundo, a unirse en oración.


    - Es un testimonio de alegría, amor y renovación espiritual.   
  • ¿Por qué el Santo Rosario?

    - Porque es una de las más conocidas devociones marianas


    - Porque en el Santo Rosario meditamos la Pasión, Muerte y Resurrección de Nuestro Señor Jesucristo.


    - Porque la Santísima Virgen, ha pedido en innumerables apariciones; vernos unidos en oración.   
  • ¿Por qué en especial los niños?

    - Porque Jesús dijo "Dejen que los niños vengan a mi" y la oración es una forma de acercarlos a él.


    - Los niños deben conocer las devociones marianas para aprenderlas a amar desde pequeños.


    - Queremos inculcar en los niños dos valores universales : la unión y la paz.


    - Los niños son dados a aprender y vivir con inocencia y sencillez, nuevas experiencias de acercamiento a Dios.


    - Porque pueden llevar a sus casas lo aprendido, haciendo partícipes a todos los miembros de la familia, de esta experiencia de oración.   
  • ¿Pueden unirse niños de otras religiones?

    Claro que si, deseamos que muchos niños se unan en oración para pedir por la paz y la unión de todos los que formamos parte de este mundo tan maravilloso. El día 18 de octubre se pueden reunir y hacer oración por esta intención y así estar sintonizados con niños de todo el mundo.
  • ¿Quién convoca esta jornada de oración?

  • ¿Dónde se puede realizar esta jornada de oración?

    - En las aulas de clase, en el patio del colegio


    - En las parroquias, las capillas


    - En el hogar, invitando a los vecinos


    - En casas hogares, hospitales
     
  • ¿Qué se necesita para unirse a "Un Millón de Niños Rezando el Rosario por la Unión y la Paz"?

    - Deseos de llevar a los niños la devoción del Santo Rosario


    - Creatividad para hacer atractiva y didáctica esta devoción para los niños y jóvenes.


    - Unirse en oración el 18 de octubre.


    - Conocer el material guía que ofrece la campaña y que puedes descargar desde la página web


    - Después de realizar la jornada de oración, enviarnos su testimonio con tres fotos y una pequeña reseña, al siguiente correo unmillondeninosrezando@gmail.com, para que otros niños conozcan y se enriquezcan con las experiencias vividas en todas partes del mundo

    18 de Octubre 2013

    Reza en tu colegio con tus amiguitos y tu profesor(a) el Santo Rosario por la unión y la paz del mundo a las 9:00 a.m.
  • 20 de Octubre 2013

    Reza en tu casa con tu familia el Santo Rosario por la unión y la paz del mundo.
  • 21 de Octubre 2013

    Reza en tu parroquia con tus amiguitos el Santo Rosario por la unión y la paz del mundo.







  • domingo, 13 de octubre de 2013

    13 de Octubre de 1307 - Arresto de los Templarios



    Al amanecer del 13 de octubre de 1307 se produjo en Francia un acontecimiento de un alcance considerable: todos los templarios franceses fueron arrestados en sus residencias. El rey de Francia, Felipe el Hermoso, de quien Bernard Saisset, obispo de Pamiers, dijo «no es ni un hombre ni un animal, sino una estatua», organizó la redada con mano de hierro.
     
    El arresto Considerando inaceptable la presión política ejercida por los templarios, y deseoso de apoderarse de sus riquezas, como se había apoderado ya de las de los judíos franceses en 1306, el rey no dudó en destrozar una orden de caballería que contaba con doscientos años de antigüedad, fundándose en «presunciones e intensas sospechas».
    Guillermo de Nogaret fue encargado de dirigir la investigación. El día 14 de octubre, el rey hizo difundir desde París un manifiesto en el que explicaba que los templarios detenidos eran culpables de idolatría, de apostasía, de prácticas sexuales vergonzosas y de ritos abominables.

    El monarca tampoco dudó en utilizar a hermanos predicadores para convencer a la población parisina de lo bien fundado de dichas acusaciones, ni en escribir varias cartas para conseguir que los gobiernas extranjeros detuviesen a tos templarios en sus propios Estados. A pesar de ser yerno de Felipe el Hermoso, el rey de Inglaterra, Eduardo II, se apresuré a poner en guardia a varios soberanos a propósito de las calumnias propagadas por el rey de Francia. A partir del 19 de octubre, y hasta el 24 de noviembre de 1307, el inquisidor Guillermo de París interrogó a 138 templados en la sala capitular del Temple de Paris, muriendo 36 de ellos como consecuencia de las torturas que les fueron infligidas.

    La actitud del papa El papa Clemente V protestó débilmente contra estos suplicios en una carta del 27 de octubre de 1307, y el día 22 de noviembre ordenó a todos los príncipes cristianos la detención de los templados que habitasen en sus territorios. En febrero de 1308, cuando iban a ser puestos a disposición del poder pontificio (pues Clemente V reclamaba también sus bienes,, los templarios franceses revocaron las confesiones hechas con anterioridad. En marzo de ese mismo año, Felipe el Hermoso convocó los Estados Generales en Tours donde reiteré su condena. En mayo, el papa se entrevisté con el rey de Francia, que no se mostraba dispuesto a ceder la fortuna del Temple. Presionado por el rey para que juzgase a la orden con la mayor severidad, Clemente y fue cediendo. Repuso en sus cargos a los inquisidores a los que había depuesto, e instituyó comisiones eclesiásticas, la primera de las cuales abrió sus sesiones en Paris, en agosto de 1309.

    La pira Después del juicio del maestre de la orden, Jacques de Molay, los templarios intentaron organizar su defensa. El rey reaccionó. El 12 de mayo de 1310, algunos templados fueron quemados cerca de la puerta de Saint-Antoine. Durante el concilio de Viena, el 22 de marzo de 1312, y cediendo a las presiones de Felipe el Hermoso, Clemente V hizo aprobar la supresión de la orden, cuyos bienes fueron entregados a la del Hospital. Y el siniestro proceso alcanzó su punto culminante el 18 de marzo de 1314, día

    ¿quiénes eran los templarios? Agrupados en torno a Hugo de Payens, algunos caballeros hicieron el voto de proteger los caminos que llevaban a Jerusalén, recuperados por los cruzados en el 1099. En 1119-1120, se fundó la orden del Temple en el mismo Jerusalén, donde se organizó y se dotó de su primera regla. Reconocida en 1128 por el concilio de Troyes, al que asistió San Bernardo, la orden conoció acto seguido un gran éxito, gracias sobre todo al notable organizador que fue Robert de Craon, quien obtuvo del papa numerosos e importantes privilegios, y en especial una total independencia con relación a los obispos. La expansión de aquellos «caballeros pobres de Cristo» fue extraordinaria Guerreros, protectores de los caminos, banqueros, administradores y constructores, los templarios se implantaron en toda Europa, llegando a reunir una fortuna considerable

    ¿Por qué se enfrentó el rey con ellos? En la época de Felipe el Hermoso, las finanzas reales tenían la consistencia de una verdadera vorágine. Además, el rey de Francia parecía obsesionado por el problema del dinero, que buscaba incansablemente allí donde pudiese encontrarse, no dudando en apoderarse de él mediante la manipulación en provecho propio de las leyes civiles y religiosas. La malsana avaricia del monarca, observada ya por sus contemporáneos, es reconocida en la actualidad por todos los historiadores objetivos La desgracia de los templarios consistió en poseer riquezas sobrestimadas, por otra parte, por el mismo rey. El papa Clemente y no parecía menos interesado en ellas que el rey de Francia, quien no logró plenamente su objetivo, pues una parte importante de los bienes de los templarios acabaría en manos o los hospitalarios.

    ¿Por qué no se defendieron? Los templarios se vieron traicionados sir duda, por miembros de la orden ávidos de lo: bienes materiales y espirituales a los que no tenían acceso, y confiados en que el rey de Francia sabría agradecerles su prevaricación La mayoría de las encomiendas de la orden en Europa eran grandes dominios rurales muy pacíficos de aspecto y fortificados en menor escasa medida. En realidad, los caballeros de] Temple no constituían una fuerza militar capaz de oponerse a una intervención de las tropas reales. Y, según parece, los templarios se vieron sorprendidos por la amplitud de las detenciones, y no adivinaron en ningún momento el trágico destino que de ellas derivaría

    ¿Como fue el proceso y de que lo acusaron? Más allá de ciertas rencillas del soberano contra el Gran Maestre y de la deuda del monarca, ambos (rey y papa) ansiaban la riqueza acumulada a lo largo de los siglos por los “pobres caballeros de Cristo”. Y nada mejor que aliarse para combatir un enemigo común y, luego, repartirse el botín. Además, la estrategia estaba servida: la Inquisición se encontraba en su apogeo y, por ende, bastaba con acusar de hechicería a la Orden y poner en marcha el macabro mecanismo, para que los Templarios fueran abandonando este mundo, la orden decayera y su inmensa riqueza pasara a mejores manos (por lo menos, en opinión del papa y del rey) Clemente V, sin un leve dejo de piedad cristiana y sin hacerse rogar, redactó una lista de acusaciones (basadas en testimonios de espías infiltrados en la Orden y en la confesión de un Templario arrepentido) y envió órdenes selladas y secretas con tales imputaciones con la imposición de ser abiertas el 13 de octubre de 1307.

    Al amanecer de aquel día, los documentos sellados se abrieron y se encontraron acusaciones varias hacia los Templarios. Tiempo atrás, habían servido para defender el poder de la Iglesia y, por ende, del papa. En 1307, su poder y su riqueza eran excesivos y Clemente V no vaciló en ordenar su impiadosa matanza, justificada” por una larga lista de inculpaciones infundadas. Las acusaciones contenían 127 artículos, que se dividían en 18 bloques cuyos títulos fueron los siguientes:

    Negación de Cristo en las recepciones.
    Negación de la divinidad de Cristo.
    Escarnio de la cruz
    Adoración de un gato.
    Negación de la eucaristía.
    Omisión de las palabras de la consagración durante la misa.
    Facultad de los grandes dignatarios de la orden para absolver los pecados.
    Besos obscenos. Secretismo en las ceremonias de recepción.
    Homosexualidad. Adoración de ídolos.
    Cuerdas o collares para colgarse de los ídolos.

    Las confesiones de los Templarios. Negligencia de los frailes en corregir sus errores. Juramentos sobre el progreso material de la orden. La fama general contra la orden. A partir de allí, lo que sigue es fácil de deducir: los caballeros de la Orden fueron detenidos, brutalmente torturados (como correspondía a la noble institución de la Inquisición) y, muchos de ellos quemados vivos en la hoguera con leña verde, atroz pena reservada para los herejes y los brujos. Por supuesto, bajo la tortura, los Templarios habían confesado ser culpables de las múltiples acusaciones que se les imputaban. Es difícil no darle la razón a alguien que utiliza como método de persuasión una tenaza para apretar los pulgares o carbones al rojo vivo sobre el cuerpo.

    ¿Se puede conceder crédito a sus declaraciones? Absolutamente ninguno. Los documentos del proceso, muy conocidos en la actualidad revelan tan sólo dos hechos esenciales: los acusados fueron torturados atrozmente, y las pretendidas «confesiones» no se obtuvieron más que en Francia. Muchos miembros de la orden declararon todo lo que se les exigió para salvarse del suplicio o de la muerte Sin embargo, algunos de ellos, con un notable valor aceptaron el sacrificio supremo para defender la reputación de la orden.

    ¿Existe Un Secreto de los templarios? Orden caballeresca, los templarios aplicaban en la práctica una regla que no era revelada más que a sus miembros, y celebraban también ritos cuyos fundamentos iniciaticos son innegables. En este sentido solamente se puede hablar de un «secreto», a saber, la propia regla vital del Temple, cuyos diversos aspectos eran comunicados a los adeptos a medida que se iba produciendo su ascenso en la jerarquía Los diferentes ritos de los templarios fueron conscientemente deformados en las acusaciones planteadas contra ellos, en las que se re— produjeron las calumnias utilizadas habitualmente por cualquier poder contra aquella comunidad que se desea destruir.

    ¿Se vengó Jacques de Molay? Solamente 31 días después del asesinato de Jacques de Molay, el papa Clemente y murió en el castillo de Roquemaure, en el valle del Ródano. Y el 29 de noviembre del mismo año Felipe el Hermoso sucumbiría como consecuen3ia de una apoplejía. Estos dos fallecimientos constituyeron un giro tanto en la historia del papado como en la del reino de Francia. Según la leyenda, Jacques de Molay les habría maldecido, emplazándolos a comparecer ante el tribunal de Dios en el plazo de seis meses.

    ¿Desaparecieron los templarios? La destrucción de la orden del Temple en Francia no se vio acompañada, en otros lugares, por la muerte de todos los templarios. Algunas ramas de la orden continuaron existiendo en otros países de Europa. Y no se puede negar, por otra parte, las estrechas vinculaciones de los templarios con las comunidades de constructores que conocieron una prolongación histórica con los gremios y ciertos ritos masónicos.

    Fuente Consultada: El Gran Atlas de la Historia Universal