jueves, 30 de julio de 2009

Tema para la Jornada Mundial de la Paz 2010

CIUDAD DEL VATICANO, 29 JUL 2009 (VIS).-"Si quieres cultivar la paz, custodia la creación", es el tema elegido por Benedicto XVI para el mensaje de la XLIII Jornada Mundial de la Paz, que se celebrará el 1 de enero de 2010.

"El tema -dice un comunicado publicado hoy- quiere solicitar una toma de conciencia sobre el estrecho lazo existente en nuestro mundo globalizado e interrelacionado entre salvaguardia de la creación y cultivo del bien de la paz".

En el comunicado se señala que "este lazo estrecho e íntimo se pone cada vez más de relieve a causa de los numerosos problemas que conciernen al ambiente natural del ser humano, como el uso de los recursos, los cambios climáticos, las aplicación y el uso de la biotecnología, el crecimiento demográfico. Si la familia humana no afronta estos nuevos desafíos con un renovado sentido de la justicia social y de la solidaridad internacional, se corre el riesgo de sembrar violencia entre los pueblos y entre las generaciones presentes y futuras".

"Siguiendo las indicaciones de los números 48-51 de la encíclica "Caritas in veritate", el mensaje papal subraya la urgencia de que la tutela del ambiente constituya un desafío para la humanidad entera: se trata del deber, común y universal, de respetar un bien colectivo, destinado a todos, impidiendo que se pueda hacer impunemente uso de las diferentes categorías de seres como se quiera".

El comunicado concluye poniendo de relieve que "la cuestión ecológica no se debe afrontar solo por las terribles perspectivas de la degradación ambiental, sino que tiene que traducirse, sobre todo, en un motivo serio para cultivar la paz" .

http://www.ewtn.com/vnews/getstory.asp?number=96812

Las Hermanas de María Auxiliadora entran en la Familia Salesiana



ROMA, jueves, 30 julio 2009 (ZENIT.org).- El rector mayor de la Congregación Salesiana y su Consejo acogieron este 28 de julio la petición hecha por las "Sisters of Maria Auxiliatrix" (Hermanas de María Auxiliadora) que solicitaron formar parte de la Familia Salesiana.

Las "Sister of Maria Auxiliatrix" (SMA) nacieron de una intuición del sacerdote salesiano, M.C. Antony, que el 13 mayo de 1976 con cuatro jóvenes dio inicio a una Pía Unión comprometida en actividades de asistencia e intervención social, informa la agencia salesiana ANS.

El carisma de las SMA está expresado en el lema "cuidar de los pobres y de las jóvenes abandonadas".

El padre Schoolz, salesiano con el cual trabajó el padre M.C Antony, apoyó al joven sacerdote. Fue construida la comunidad de recuperación para jóvenes mujeres abandonadas en la pobreza de Vyasarpadi, en la provincia de Tamiles Nadu, en India meridional.

Después de la muerte del fundador, el 23 de enero de 1990, el inspector de Chennai, padre Vincent Durairaj, nombró al padre Rozario Krishnaraj asistente eclesiástico de la Pía Unión.

Las "Sister of Maria Auxiliatrix" se transformó en una congregación de derecho diocesano en 1999, con la aprobación de monseñor James Masilamony Arul Das, arzobispo de Madras y Mylapore. Su sucesor, monseñor Malayappan Chinnappa, salesiano, aprobó las Constituciones, revisadas a la luz del Magisterio eclesiástico, el 15 de diciembre de 2005.

Hoy las "Sister of Maria Auxiliatrix" son cerca de 110, distribuidas en 23 comunidades presentes en siete diócesis de la India.

Algunas comunidades colaboran con los salesianos. Las principales actividades de las SMA son la enseñanza formal y no formal para jóvenes pobres, la evangelización, los orfanatos y los centros de acogida diurna.

Empeñadas en el ámbito social las "Sister of Maria Auxiliatrix" trabajan en red con otras realidades sobre el territorio y en áreas rurales.

Las "Sister of Maria Auxiliatrix" son el grupo número 27 de la Familia Salesiana.


http://www.zenit.org/article-32079?l=spanish

Teresita Ramírez perdió a toda su familia pero no perdió la fe



MEDELLÍN, martes, 28 julio 2009 (ZENIT.org).- Para Olga Teresita Ramírez, la vida cambió totalmente el pasado 15 de junio al ser la única sobreviviente de un accidente de tránsito en el que perdió a su esposo, sus cinco hijos, su suegro y tres cuñadas.

Transcurrido un poco más de después de esta tragedia, ella ha conservado su entereza y sus deseos de seguir viviendo. Una fortaleza que viene de lo alto. Una fe que transmitió siempre a los suyos: "Esa fe y el amor a María lo tengo desde que estaba muy pequeña", dijo en diálogo con ZENIT.

Una peregrinación que llegó a la eternidad
La familia Ortiz Ramírez vivía en el municipio de La Ceja, población de cerca de 50 mil habitantes, ubicada hacia el noroccidente de Colombia, a 41 kilómetros de Medellín.

Aprovechando la temporada de vacaciones, habían planeado una peregrinación a una localidad llamada Buga, ubicada en la región del Valle del Cauca, cerca al mar pacífico colombiano, donde está situado uno de los santuarios más importantes de este país: el del Señor de los Milagros.

Diego, el esposo de Teresita le había prometido el año pasado visitar con su familia el lugar, conocido también como el "Milagroso de Buga", para pagar una promesa.

Al viaje se unieron Alfonso, el papá de Diego y tres de sus hermanas: Virgelina, Marta y Ana. Eran doce los peregrinos, (incluyendo a Fernando el conductor, quien también murió) quienes partieron a las 6:15 de la tarde en un pequeño bus que decidieron alquilar. Tenían estimado llegar a Buga a la madrugada del día siguiente.

A mitad de camino, el bus tropezó con un árbol y cayó a un barranco que daba al Río Cauca, el segundo río más grande de Colombia. Teresita logró salir del vehículo y quedó atrapada por las piedras del barranco a las que se sostuvo fuertemente. "¿Quien quedó vivo?", preguntaba la mujer. Nadie le respondía.

En ese momento se dio cuenta de que había sido la única sobreviviente del accidente. Era tal la oscuridad que no lograba ver los restos del vehículo. Solo sentía la corriente del caudaloso río que se lo llevó inmediatamente.

Al escuchar la fuerza de las aguas del Cauca se preguntaba "¿me lanzo?, total no sé nadar y así me voy con mis seres queridos...".

Confesó, en diálogo con ZENIT que a veces deseaba que la picara una serpiente para no vivir el resto de su vida con la honda pena de haber perdido a toda su familia.

Pero luego, entró en la realidad. Pensó en la Madre de Dios, y decidió dialogar con ella hasta esperar que alguien la lograra rescatar: "María, si tú me dejaste acá después de tener un esposo y cinco hijos, tu dirás para qué me necesitas", le dijo a la Virgen.

Sosteniéndose con las piedras de barranco, en medio de una fuerte lluvia, Teresita permaneció durante cuatro horas, esperando ser rescatada. Cada vez que escuchaba ruidos daba gritos de auxilio. Confiesa que fueron cuatro horas las que estuvo allí donde aprovechó para mirar hacia el pasado, agradecer a Dios por la familia que había tenido y para ver que como madre y esposa no tenía remordimientos.

Así Teresita logró ver una luz y descubrió la salida del barranco. Por allí subió para pedir ayuda a unos trabajadores que se encontraban en la carretera. Minutos después llegaron las ambulancias y la policía para comenzar la búsqueda y el rescate de los cuerpos sin vida de sus familiares.

El sepelio común de los seres queridos de Teresita, se realizó tres días después del accidente. Asistieron decenas de miles de personas de La Ceja y de sus alrededores. La eucaristía fue celebrada por el obispo de la diócesis de Sonsón-Rionegro, monseñor Ricardo Tobón, quien dijo en su homilía aseguró que los miembros de esta familia "iban a un santuario con el corazón lleno de gratitud. Estaban en comunicación con Dios y así terminaron su peregrinación en un encuentro con Él".

Una familia que la espera en el cielo
Teresita asegura que la fe en Dios y el amor a María Auxiliadora es lo que cada día la llena de fuerzas para afrontar la anuencia de su esposo y de sus hijos. También el amor que siempre recibió y entregó en su familia durante estos 18 años de matrimonio.

Así mira con algo de melancolía y a la vez con sentido de gratitud la vida de los seres que más quería: su esposo, Diego, y sus hijos Paola, la mayor de 16 años, Diego Alejandro de 14, Sarita de 12, Carlos Mario de 10, y Mateo el menor con siete años.

Cada día lucha por vencer la tristeza repitiéndose la frase que decía San Juan Bosco, uno de sus santos preferidos "La santidad consiste en estar siempre alegres".

"Mi matrimonio no fue perfecto. Tuve muchas dificultades. Pienso que valió la pena soportarlas. El amor todo lo soporta, por eso ahora estoy fuerte", confiesa Teresita.

"Los niños eran muy cariñosos con nosotros, el papá era muy dedicado. Todo su tiempo libre era para ellos. La Navidad era hermosísima. Mi esposo hacía el pesebre con todos, y le ponía mucho amor. Hacíamos la Novena al niño Jesús y venían entre 35 y 40 niños. Era como algo mágico. En la última Navidad, Diego nos había comprado un árbol hermoso".

Recuerda que Paola su hija mayor estaba por terminar el colegio, donde siempre fue una gran líder y pensaba hacerse religiosa salesiana. Quería hacer un voluntariado en enero para discernir si era ese su llamado.

"Hace poco vi su billetera y me di cuenta de que tenía un adhesivo que decía 'Cristo, alimento de mi alma'", cuenta Teresita.

Paola era a la vez muy alegre y pícara. Trabajaba en la catequesis de la parroquia. El pasado mes de mayo le hizo un altar a la Virgen que decía: "María, ven y guía mis pasos". Lograba reunir a toda la familia para que oraran juntos.

"Diego Alejandro era más imperativo y rebelde, el que más líos me trajo en los colegios", confiesa Teresita. "Pero siempre me decía que me quería y cuando reaccionaba bruscamente tenía la humildad de pedir perdón".

"De Sarita, nunca recibí una queja. Era muy tierna, me decía: 'Mami, dame un abrazo, que cuando me abrazas yo me siento tranquila. Yo tengo la mamá más linda del mundo. No de La Ceja sino del mundo", recuerda Teresita.

Cuenta que Carlos Mario era el más serio pero también el más detallista y agradecido con lo que le daban. "Era el más ordenado con su cajón y su ropa. También era el más sincero"

Mateo, el menor, tenía siete años. "Era el amor, era un niño muy alegre. Le encantaba el fútbol, era muy sociable, le gustaba compartir con los niños, estaba pendiente de las profesoras. Me adoraba y me decía: 'yo no podría vivir si tú te mueres'", cuenta su madre.

Los sacerdotes salesianos de La Ceja que siempre tuvieron una estrecha amistad con Teresita, decidieron viajar al santuario del Señor de los Milagros a pagar la promesa que quiso y no pudo, pagar la familia Ortiz Ramírez.

Teresita no sabe aún a qué se dedicará, ya que su vida estaba totalmente volcada a su familia. Ha recibido propuestas de trabajo y becas de estudio en Bogotá, pero ella no quisiera abandonar su pueblo. Tiene a sus padres vivos y regresó a vivir con ellos. Tiene once hermanos que están pendientes de ella y la acompañan.

Uno de ellos asegura que la historia de Teresita es como la de Job, quien al perderlo todo dijo: "el Señor me lo dio, el Señor me lo quitó". Ella se ríe y dice "el hecho de que esté fuerte no quiere decir que sea santa".

En La Ceja muchos se preguntan qué ha hecho esta mujer para estar de pie ante este inmenso dolor. Visitó al psicólogo y al psiquiatra. quienes aseguran que de salud mental está perfecta.

Y mientras tanto... Teresita observa las fotos de sus seres queridos, mira al cielo y asegura: "Allá están ellos, falta ver cuando será el día en que todos nos vamos a reunir".

Por Carmen Elena Villa

http://www.zenit.org/article-32067?l=spanish

Asamblea XCII de Obispos de Venezuela



Caracas, 10 de julio de 2009

En vísperas de culminar la nonagésima segunda Asamblea Plenaria Ordinaria que se está llevando a cabo desde el pasado martes 07 y se prevé finalice este domingo 12 de julio de 2009, los obispos venezolanos ofrecieron en rueda de prensa la Exhortación “Vivan en la verdad y el amor de Cristo”, así como también leyeron tres documentos en los que hicieron referencia al Proyecto de la Ley sobre Igualdad de Género, Proyecto de Ley de Educación y Proyecto de Ley de Medios de Comunicación Social y nuevas disposiciones de la Comisión Nacional de Telecomunicaciones (CONATEL).

De dicha exhortación hay que destacar el recuento acerca de la visita “Ad Límina Apostolorum”, uno de los momentos más significativos, pues fue el encuentro con el Santo Padre y el Presidente de la Conferencia Episcopal quien dirigió un saludo al Papa, presentándole la situación en la que la Iglesia en Venezuela desarrolla su tarea pastoral y los retos que debe enfrentar.

“El Santo Padre nos animó a cultivar una más estrecha comunión afectiva y efectiva entre nosotros, a prestar una atención especial a los sacerdotes, a tener un particular interés por los seminaristas, y a iluminar y promover la participación de los laicos, llamados a ordenar las realidades temporales de modo que respondan al designio amoroso de Dios”, señaló Monseñor Ulises Gutiérrez, Obispo de Carora, así como también indicó que el Papa les dijo “contáis con mi apoyo, solicitud y cercanía espiritual. Y os pido que llevéis mi saludo afectuoso a todos los miembros de vuestras iglesias particulares”.

Explicaron que al terminar la visita Ad Límina, tuvieron la oportunidad de participar en la apertura del Año Sacerdotal, cuyos límites fijó el Santo Padre entre el 19 de junio de 2009 y el 19 de junio de 2010, que “nace bajo el signo de la continuidad del Año Paulino y de la necesaria profundización en la propia identidad sacerdotal y en la misión como urgencia de nuestro tiempo”.

Venezuela hoy

Asimismo, los obispos manifestaron que “durante la Asamblea hemos orado, compartido y reflexionado mucho, conscientes de que la realidad de América Latina y de Venezuela es muy grave”. Esto, pues “después del referendo del 15 Febrero de 2009 se ha acelerado la imposición arbitraria y unilateral del proyecto de socialismo del siglo XXI, lo cual irrespeta la voluntad popular, lo señalado en la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela y la participación real y libre de los ciudadanos. El desconocimiento de las autoridades electas el año pasado, cercenándoles sus atribuciones con cambios legales que violan el texto constitucional, contraría la igualdad que debe reinar entre todos los electos, quienes tienen los mismos derechos y obligaciones“.

Es por esto que hicieron un llamado de alerta ante la discusión de leyes que “afectan ampliamente el ejercicio responsable de la libertad de los ciudadanos, de sus familias, del recto desempeño social; en particular, la de educación, la de equidad e igualdad de género, la de la propiedad social y la que se refiere a la libertad de expresión e información”.

En el ámbito internacional los obispos también expusieron su posición indicando que “nos duele la crisis político social del hermano país de Honduras, pedimos al Señor que el pueblo hondureño encuentre la reconciliación a través del diálogo, la sanación de sus heridas y el camino del proceso democrático, respetando la soberanía de ese país”.

Nahomy Velasquez.

http://padrejosegregoriosalazar.blogspot.com/2009/07/asamblea-xcii-de-obispos-de-veezuela.html

Acoso de protestantes frena ola de conversiones al catolicismo en India



El Obispo de Kohima, Mons. Jose Mukala, denunció que el acoso de algunos grupos protestantes en el noreste de la India ha evitado que miles de personas se conviertan al catolicismo.

En declaraciones a la asociación Ayuda a la Iglesia Necesitada (AIN), Mons. Mukala informó que hay ataques y propaganda sistemática contra la Iglesia, amenazas contra su vida, destrucción de edificios eclesiales y una prohibición de las conversiones decretada por los ancianos de las aldeas en una región de mayoría protestante.

Mons. Mukala expresó su preocupación por la actitud de algunas comunidades bautistas y grupos evangélicos que niegan el derecho a la libertad de religión de los pobladores indios.

“Hay un gran incremento en el número de personas que desean convertirse al catolicismo pero hay una oposición muy fuerte por parte de los líderes protestantes”, explicó.

La fe católica llegó a Kohima en 1951, con los primero bautizados. Los católicos ahora suman 58,000 personas entre los 1.9 millones de habitantes de la región.

http://www.aciprensa.com/noticia.php?n=26253

Sudán: un obispo advierte contra una secta separatista



RUMBEK, miércoles, 29 julio 2009 (ZENIT.org).- Los católicos y otros cristianos del Sur de Sudán han sido advertidos por un obispo católico contra la "Iglesia Reformada Católica", una secta separatista que ha iniciado su actividades en esta región autónoma.

El obispo Cesare Mazzolari de Rumbek ha escrito una carta pastoral advirtiendo a los cristianos contra los "falsos maestros y líderes eclesiales desorientadores" que actúan en la región. Afirma que los líderes de la secta han abandonado el celibato sacerdotal y la obediencia al Papa, según informa la agencia católica africana CISA.

"Os estoy alertando claramente y con fuerza, queridos cristianos, de que quienes se autodenominan ‘Iglesia Reformada Católica', con toda verdad no son ya miembros aceptables de la Iglesia Católica y deberíais dejar de seguirles", afirma el obispo.

Los miembros de la nueva secta son imitadores que remedan las oraciones, lecturas y ceremonias externas de las celebraciones católicas de tal modo que la gente sencilla piensa que está asistiendo a la misa o servicio de oración católicos, subraya el obispo Mazzolari.

Sin embargo, en sus enseñanzas, los miembros de esta secta critican la doctrina de la Iglesia Católica como anticuada y desfasada y denigran a los líderes eclesiales acusándoles de ser incapaces de comprender el cambio de los tiempos.

"Estos católicos reformados recurrirán a la lucha del pueblo como algo que la tradicional Iglesia católica no es capaz de afrontar o resolver. Esta idea es también totalmente falsa porque la Iglesia ha estado muy cerca del pueblo y sus líderes para obtener la paz y la necesaria reconciliación", escribe el obispo Mazzolari.

El prelado señala también que la nueva secta está buscando a los católicos insatisfechos para confundirlos y dividirlos. "Os desorientarán para que os llenéis de resentimiento contra vuestra Iglesia como ellos están resentidos, y para desobedecer las leyes de la Iglesia, como hacen ellos, y que perdáis vuestro precioso don de la fe".

El obispo concluye su carta pastoral describiendo a los católicos reformados como "el demonio que ronda alrededor en nuestros días tratando de desviar al pueblo de la fe".

Por Nieves San Martín

http://www.zenit.org/article-32068?l=spanish

Cardenal venezolano defiende la educación religiosa en su país



CARACAS, jueves, 30 julio 2009 (ZENIT.org).- La educación religiosa "es un derecho que ya ha sido consagrado", y una educación pluralista y nacionalista no puede irse "en detrimento de estos derechos".

Así lo aseguró ayer el arzobispo de Caracas, cardenal Jorge Urosa Sabino, respondiendo a las declaraciones del ministro de educación venezolano, Héctor Navarro, sobre la Ley Orgánica de educación que excluye la enseñanza de religión en los colegios públicos de este país.

Según el ministro, la enseñanza de una religión particular llevaría a "no respetar las creencias de otras religiones".

La Ley Orgánica de Educación fue presentada ayer miércoles en el Teatro Municipal de Valencia. Plantea que se asuma el proceso educativo con "una visión democrática basada en principios de libertad de conciencia, solidaridad, tolerancia, respeto y justicia".

Esta ley buscará hacer énfasis en la educación ambiental, lingüística, la historia y la geografía, porque según sus defensores "están vinculadas con la soberanía del país".

El purpurado exhortó a que "se mantenga la educación religiosa de acuerdo a la orientación de los padres y los alumnos que están estudiando en esa escuela determinada".

"La ley actual no debe echar atrás esa conquista que no es sino el reconocimiento de la necesidad que hay de que el pueblo venezolano tenga la formación religiosa", dijo el arzobispo de Caracas.

Aseguró que en la nueva ley de educación es importante que "se tenga en cuenta no sólo el pluralismo democrático, la apertura de la ley a todas las corrientes del pensamiento, el derecho y la responsabilidad de la familia"

"Que el Estado no sea un factor único de la educación, que no haya un monopolio de la educación por parte del Estado", exhortó el purpurado.

También exhortó a la Asociación Venezolana de Educación Católica y a todas las instituciones y familias venezolanas "para que se movilicen y manifiesten su deseo de que se mantenga en la nueva Ley de Educación la educación religiosa escolar y dentro del horario escolar".

http://www.zenit.org/article-32081?l=spanish