martes, 27 de abril de 2010
Benedicto XVI: Recuperar el rostro de la persona en internet
CIUDAD DEL VATICANO, martes 27 de abril de 2010 (ZENIT.org).- “Os exhorto a recorrer, animados por el valor del Espíritu Santo, los caminos del continente digital”, así habló el Papa Benedicto XVI el pasado sábado a los participantes en el Congreso Nacional Testigos digitales. Rostros y lenguajes en la era crossmediática, promovido por la Conferencia Episcopal Italiana.
“Nuestra confianza no está acríticamente depositada en instrumento alguno de la técnica – afirmó el Pontífice –. Nuestra fuerza está en ser Iglesia, comunidad creyente, capaz de testimoniar a todos la perenne novedad del Resucitado, con una vida que florece en plenitud en la medida en que se abre, entra en relación, se dona con gratuidad.”.
El Papa rconoció que en la época actual “conoce un enorme ensanchamiento de las fronteras de la comunicación, realiza una convergencia inédita entre los diversos medios de comunicación y hace posible la interactividad”.
La red manifiesta, por tanto, “una vocación abierta, tendencialmente igualitaria y pluralista”, pero al mismo tiempo “abre una nueva brecha”, que hoy se llama la “brecha digital”.
Esto “separa a los que están dentro de los que están fuera, y se añade a las demás brechas que ya alejan a las naciones entre sí y en su interior”.
Aumentan también “los peligros de homologación y de control, de relativismo intelectual y moral, ya bien reconocibles en la flexión del espíritu crítico, en la verdad reducida al juego de las opiniones, en las múltiples formas de degradación y de humillación de la intimidad de la persona”, una auténtica “contaminación del espíritu”.
Los cristianos, sin embargo, deben superar “esas dinámicas colectivas que pueden hacernos perder la percepción de la profundidad de las personas y aplanarnos sobre su superficie”, y que transforman a las personas en “cuerpos sin alma, objetos de intercambio y de consumo”.
Es necesario volver a contemplar el “rostro” de cada persona, explicó el Papa.
“Los medios de comunicación se pueden convertir en factores de humanización”, cuando “están organizados y orientados a la luz de una imagen de la persona y del bien común”, y se centran “en la promoción de la dignidad de las personas y de los pueblos”, animados por la “caridad” y puestos “al servicio de la verdad, del bien y de la fraternidad natural y sobrenatural".
Sólo en estas condiciones “el cambio de época que estamos atravesando puede revelarse rico y fecundo en nuevas oportunidades”.
Misión digital
En este sentido, el Papa subrayó que la Iglesia tiene una importante misión en este campo, y que debe adentrarse “en el mar digital, afrontando la navegación abierta con la misma pasión que desde hace dos mil año gobierna la barca de la Iglesia”.
“Más que por los recursos técnicos, aún necesarios, queremos cualificarnos habitando este universo con un corazón creyente, que contribuya a dar un alma al ininterrumpido flujo comunicativo de la red”.
Cada cristiano que trabaja en los medios de comunicación, explicó, tiene la misión de “allanar el camino a nuevos encuentros, asegurando siempre la calidad del contacto humano y la atención a las personas y a sus verdaderas necesidades espirituales”.
Hay que ofrecer “a los hombres que viven en este tiempo 'digital' los signos necesarios para reconocer al Señor", añadió el Papa.
Para concluir, exhortó a los profesionales de la comunicación a “no cansarse de nutrir en su propio corazón esa sana “pasión por el hombre” que se convierte en tensión a acercarse cada vez más a sus lenguajes y a su verdadero rostro”.
“Os ayudará en esto una sólida preparación teológica y sobre todo una profunda y alegre “pasión por Dios”, alimentada en el continuo diálogo con el Señor”, agregó.
http://www.zenit.org/article-35136?l=spanish