Y más buenas noticias, ahora desde Caracas, donde luego de algunas vicisitudes y de la extensión de la campaña de recolección, se logró una humilde donación al orfanato “Mi Refugio”, donde reside un grupo de niños y adolecentes abandonados o en situación de riesgo, el preceptor Fr. + Lester Mijares encabezó la comitiva que fue recibida afectuosamente por las autoridades encargadas de dicha institución que tan bella labor ejecuta, cumpliendo así el fin máximo que dio origen a las diversas actividades que se estuvieron desarrollando. Aclaramos que la cámara fotográfica con la cual se capturan las imágenes de las actividades está mal configurada, y de ahí que las fechas de las fotos no concuerden con la de publicación. Es de destacar que durante la ejecución de sus deberes los miembros de esta preceptoria fueron provocados a la violencia en repetidas ocasiones, además de sufrir discriminación por parte de personas afectas a sectas cristianas que adversan al catolicismo, y también ateos; cuestión que en ningún momento los desanimó, sino que más bien les dio fuerzas para continuar con la difusión de los valores cristiano-católicos de Occidente, poniendo una y mil veces la otra mejilla a manera de que por la fuerza del amor y a través del ejemplo de humildad, disposición y trabajo se entienda cual es la fe verdadera.
Non Nobis
