EL AÑO LITURGICO
El Año Litúrgico está formado por distintos
tiempos litúrgicos. Estos son tiempos en los cuales la Iglesia nos invita a
reflexionar y a vivir de acuerdo con alguno de los misterios de la vida de
Cristo. Comienza con el Adviento, seguido por la Navidad, Epifanía, llamado
Primer Tiempo Ordinario.
*ADVIENTO: Es tiempo de espera para el nacimiento de Dios en el mundo. Es recordar a Cristo que nació en Belén y que vendrá nuevamente como Rey al final de los tiempos. Al terminar el Adviento, comienza el Tiempo de Navidad, que va desde el nacimiento de Jesús, que se celebra el 25 de diciembre y nos recuerda que Dios vino al mundo para salvarnos.
*El Segundo Tiempo Ordinario está conformado por la Cuaresma, Semana Santa, Pascua, Tiempo Pascual, Pentecostés; y termina con la fiesta de Cristo Rey.
En cada tiempo litúrgico, el sacerdote se reviste con diferentes colores
BLANCO: Significa alegría y pureza. Se utiliza en el tiempo de Navidad y de Pascua.
VERDE: Significa esperanza. Se utiliza en tempo Ordinario.
MORADO: Significa luto y penitencia. Se usa en Adviento, Cuaresma y Semana Santa.
ROJO: Significa el fuego del Espíritu Santo y el martirio. Se utiliza en las fiestas de los santos mártires y en Pentecostés.
*ADVIENTO: Es tiempo de espera para el nacimiento de Dios en el mundo. Es recordar a Cristo que nació en Belén y que vendrá nuevamente como Rey al final de los tiempos. Al terminar el Adviento, comienza el Tiempo de Navidad, que va desde el nacimiento de Jesús, que se celebra el 25 de diciembre y nos recuerda que Dios vino al mundo para salvarnos.
*El Segundo Tiempo Ordinario está conformado por la Cuaresma, Semana Santa, Pascua, Tiempo Pascual, Pentecostés; y termina con la fiesta de Cristo Rey.
En cada tiempo litúrgico, el sacerdote se reviste con diferentes colores
BLANCO: Significa alegría y pureza. Se utiliza en el tiempo de Navidad y de Pascua.
VERDE: Significa esperanza. Se utiliza en tempo Ordinario.
MORADO: Significa luto y penitencia. Se usa en Adviento, Cuaresma y Semana Santa.
ROJO: Significa el fuego del Espíritu Santo y el martirio. Se utiliza en las fiestas de los santos mártires y en Pentecostés.
¿CÓMO SE PREPARA EL ALTAR?
* Limpieza y cuidado. El mantel bien limpio y sin arrugas. Todo lo demás hay que tratarlo con mucho cuidado, son cosas que sólo usamos para Dios.
* Corporal. Es un paño cuadrado que hay que desplegar con mucho cuidado: con la cruz hacia la parte de abajo hay que poder abrirlo a la izquierda, luego a la derecha, luego hacia arriba y al final hacia abajo. Haciéndolo así no se arrugará y evitará tirar ninguna partícula al suelo (porque en cada una de ellas está Jesús).
* La Patena. Es el recipiente donde están las formas, que luego serán el Cuerpo de Cristo, por ello está dorado por dentro.
* El Cáliz. Donde se echa vino y un poco de agua, que luego se consagrará y será la sangre de Cristo, por eso también está dorado por dentro.
* El Purificador. Es un paño con una cruz en el centro y sirve para limpiar (purificar) la patena y el cáliz.
* Las vinageras. Con vino y agua. Se han de evitar poner encima del altar, para que no se manche el mantel. Se ofrecen al sacerdote para que las use.
* El Misal con su atril. Se pone a la izquierda.
Utensilios Litúrgicos
¿QUÉ ES LA
HOSTIA CONSAGRADA?
¿Qué es? ¿Qué significa?
La Hostia, antes de la Consagración, es pan de trigo. La Hostia, después de la Consagración, es el Cuerpo de Jesucristo, con su Sangre, su Alma y su Divinidad.En la Eucaristía permanecen el olor, color y sabor del pan y del vino; pero su substancia se ha convertido en el Cuerpo y en la Sangre de Jesucristo .
Esta conversión se llama transubstanciación. Es el tránsito de una cosa a otra. Cesan las sustancias del pan y el vino porque suceden en su lugar el cuerpo y la sangre de Cristo.
La transubstanciación es una conversión milagrosa y singular, distinta de las conversiones naturales. Porque en ella, tanto la materia como la forma del pan y del vino se convierten en el Cuerpo y la Sangre de Cristo. Seguimos viendo el pan y el vino pero substancialmente ya no lo son, porque en ellos está realmente el cuerpo, sangre, alma y divinidad de Cristo.
Del pan sólo quedan las apariencias, que se llaman especies sacramentales.
En el cáliz, antes de la Consagración, hay vino de uva. En el cáliz, después de la Consagración, está la Sangre de Cristo, con su Cuerpo, su Alma y su Divinidad.
Del vino sólo quedan las apariencias, que se llaman especies sacramentales.
Jesucristo, en razón de su única Persona, está entero en cada una de las dos especies sacramentales; por eso, para recibirlo, no es necesario comulgar bajo las dos especies de pan y vino: basta cualquiera de las dos para recibirlo entero.
Cristo en la eucaristía está vivo, resucitado. «No se trata de una venerable reliquia, como sería el cuerpo muerto de Cristo; sino de Jesús vivo como dice San Juan pan vivo . Y por ello vivificante. Comer el cuerpo vivo y resucitado de Jesús nos llevará a nosotros mismos a la resurrección final gloriosa» «El que come mi carne y bebe mi sangre tiene la vida eterna y yo lo resucitaré en el último día».
¿CÓMO SE FABRICAN LAS FORMAS?
Las obleas se elaboran con masa de pan ácimo, es decir, sin levadura, como el que usó Jesucristo en la Última Cena.
La receta de la oblea es muy sencilla: agua y una mezcla de harinas diferentes de trigo. Una de ellas, que es rica en gluten, es la que le confiere su textura acorchada. Tras obtener la masa, se extiende y se calienta entre dos planchas a 170 grados centígrados, lo que facilita la evaporación de los residuos líquidos. De este modo, se obtienen láminas delgadas de pan seco que son apiladas y humedecidas. Finalmente, las obleas se cortan con un cortamasas especial y se dejan airear durante unos seis días, antes de ser empaquetadas y distribuidas.
EL ORDINARIO DE LA MISA - Cuándo pararse, sentarse o arrodillarse en Misa
Recipiente en forma de copa con apertura ancha utilizada
para beber. En la Liturgia cristiana, el cáliz es el vaso sagrado por
excelencia, indispensable para el sacrificio de la Santa Misa ya que debe
contener el vino que se convierte en la Sangre preciosísima de Cristo.
Vaso
con tapa en el que se conservan la Sagradas Hostias para poder llevarlas a los
enfermos y emplearlas en las ceremonias de culto. En la actualidad los copones
suelen ser de menos estatura que lo cálices para distinguirlos de esto.
Recipiente sagrado donde se pone la Eucaristía de manera
que se pueda ver para la adoración. Hay gran variedad de tamaños y estilos.
Generalmente alrededor de la Eucaristía se representan rayos que simbolizan las
gracias conferidas a los que adoran.
Acetre:
Caldero de agua bendita que se usa para las aspersiones
litúrgicas. El agua se recoge del acetre y se dispersa con el hisopo.
Hisopo
Utensilio con que se esparce el agua bendita, consistente
en un mango que lleva en su extremo un manojo de cerdas o una bola metálica
hueca y agujereada para sostener el agua. Se usa con el Acetre.
Es el lienzo sobre el que se coloca el Cáliz y la patena durante la celebración eucarística.
Es el lienzo sobre el que se coloca el Cáliz y la patena durante la celebración eucarística.
Paño blanco que utiliza el sacerdote para secarse los labios después de comulgar y para limpiar (purificar) los vasos sagrados.
El
cubrecaliz se debe utilizar en la Misa. La tela y el color hacen juego
habitualmente con los ornamentos, aunque puede ser siempre blanco.
Cuando se pone debajo una palia, cae con elegancia.
Elliot afirma que el uso de la carpeta de corporales tiene ventajas, ya que
mantiene limpio el corporal que es usado frecuentemente por los ayudantes y
otros ministros.
Son
dos pequeñas jarritas en las que se pone el vino y el agua necesarios para la
Misa. El sacerdote mezcla con el vino unas gotas de agua. Puede usarse para ello
una cucharilla. Las vinajeras son de cristal o vidrio, por razón de limpieza y
para que el sacerdote pueda identificar el agua y el vino. Pueden ser de plata,
bronce o estaño.
El
celebrante utiliza para el lavabo una jarra con agua y un aguamanil, que pueden
ser de cristal, de cerámica o de metal. Para el Lavabo se necesita: una jarrita
con agua; un recipiente o aguamanil para recogerla; y un Manutergio, para que el
sacerdote se seque las manos.
El Incensario es un braserillo metálico suspendido por unas cadenas y con una tapa en cuyo interior se quema el incienso y se utiliza para incensar.
El Incienso es una resina que produce un agradable aroma al arder. El incienso es utilizado para manifestar la adoración. El incienso simboliza la oración que sube hasta Dios. Se guarda en la naveta.
La naveta es el recipiente donde se echa el incienso y el que se ofrece al sacerdote cuando hay que incesar. ¿Cuándo se inciensa en la Misa?
- Al principio. Tras el beso al altar del sacerdote.
- Al Evangelio. Cuando comienza el Aleluya.
- A las ofrendas. Después de su bendición.
- Al sacerdote y al pueblo. Tras las ofrendas.
- Al Señor. Tras la consagración de las especies.
- A la imagen de la Virgen. Si hay canto final.
La Bandeja para la Comunión se sigue utilizando en muchas iglesias. Tiene por finalidad evitar que, por descuido, pueda caer alguna Forma Consagrada
al suelo.
Es
utensilio en forma de copa invertida de tamaño pequeño que se utiliza para
convocar a la plegaria Eucarística, llamar la atención y expresa sentimiento de
alegría.
Es el soporte o sostén donde se
coloca la vela y que se usa en la liturgia como símbolo de la luz, que es
Cristo.
Se
llama mantel en la liturgia al lienzo que cubre el altar, en señal de respeto a
la mesa en la que Cristo nos invita a comulgar. Suele ser blanco, pero admite
adornos y franjas de color.
Recipiente o ampolla
donde se guardan los óleos tanto el crisma, como el óleo de los catecúmenos o el
de los enfermos.
VESTIDURAS
SAGRADAS
Alba:
El Alba se corresponde a la “túnica” que usaban los romanos hacia el siglo IV. Era de forma amplia, con mangas largas y llegaba hasta el suelo. El nombre viene de la palabra latina que significa “blanco”. La Túnica blanca recuerda la vestidura bautismal y es la vestidura propia de todos los que desempeñan una función litúrgica.
Cíngulo:
Amito:
Debajo del alba, en especial cuando no cubre
completamente el cuello, se usa el Amito. Es una pieza de lino del tamaño de un
pañuelo.Recuerda el lienzo con que fue vendado Jesús cuando los soldados se
mofaban de Él.
Se pone en contacto con la cabeza, para que nos libre de pensamientos inútiles y malévolos durante la Misa; se mete alrededor del cuello para restringir el uso de la lengua antes y después de la Santa Misa.
Se pone en contacto con la cabeza, para que nos libre de pensamientos inútiles y malévolos durante la Misa; se mete alrededor del cuello para restringir el uso de la lengua antes y después de la Santa Misa.
Estola:
Tira larga de tela que va sobre el alba, símbolo del poder del orden sagrado. Sólo la llevan obispos, sacerdotes y diáconos.El Sacerdote la lleva puesta en la Misa y para la administración de los sacramentos, como signo visible de su sacerdocio. Los Diáconos la usan desde el hombro izquierdo al costado derecho.
Al cubrir el cuello, los hombros y el pecho, naturalmente, nos recuerda la dignidad del trabajo cotidiano, hecho con alegría y con celo, por la causa de Cristo, a la vez que con el pensamiento en el eterno estado de inmortalidad
Vestidura propia del sacerdote para la Santa Misa, como un gran gabán sobre el alba y la estola. Cambia de color según la fiesta. Simboliza a Cristo que cubre su cuerpo místico.
Simboliza el yugo del servicio de Cristo, y así mismo de sus Mandamientos, cuyo cumplimiento nos es fácil por su amor.
Capa de honor que se usa para las procesiones con el Santísimo y la Bendición eucarística, tanto si se hace con el copón como cuando se hace con la custodia, el sacerdote (o el diácono) usan el Paño de hombros o paño humeral de amplias proporciones.
Humeral o Paño de
Hombros:
Para las procesiones con el Santísimo y la Bendición eucarística, tanto si se hace con el copón como cuando se hace con la custodia, el sacerdote (o el diácono) usan el Paño de hombros o paño humeral de amplias proporciones
La Mitra es una insignia propia de los obispos. Indica la plenitud del sacerdocio.
Normalmente es de color blanco y está especialmente adornada. En la actualidad, las mitras tienen dos puntas, una colocada hacia delante y otra hacia atrás
El báculo pastoral es un cayado que llevan los obispos como signo de su función pastoral. El báculo pastoral viene usándose como distintivo del oficio de los obispos desde siglo VII, por lo menos, en Espana, como consta por testimonios de San Isidoro; pero es creíble que ya desde el siglo IV lo llevaran algunos obispos con dicho significado, según lo manifiesta algún texto de escritores de la época. Su material de fabricación ha sido la madera, el marfil, el hierro, el bronce, la plata y el oro y con frecuencia se hallan ejemplares adornados con los más exquisitos detalles del arte, conservándose algunos desde el siglo XI y muy preciosos desde el XIII